Tuvimos la oportunidad de hablar con algunos agricultores con visión de futuro de LATAM. Compartieron que han logrado un notable éxito con la productividad de la caña de azúcar en sus explotaciones: casi 120 toneladas por hectárea. Su secreto es sencillo: aprovechar al máximo la luz del sol. La caña de azúcar es conocida como una de las plantas fotosintetizadoras más eficaces del mundo. Cuanta más luz solar reciben las hojas, más fotosíntesis se produce y más azúcar se desarrolla.
Durante algún tiempo, han tenido que hacer frente a diversas dificultades:
- En las grandes explotaciones es difícil mantener la distancia necesaria entre cañas,
- Comprobación de la cobertura de las cubiertas para garantizar la mayor absorción de luz solar para cada caña de azúcar,
- Controlar la altura de las plantas, así como el desarrollo de su circunferencia,
- La ubicación de las plantaciones presenta lagunas para un uso más eficiente de la tierra,
- Detectar la infestación de malas hierbas que roban los nutrientes a las plantas, y
- Examinar los efectos de las operaciones y medirlos.
Utilizando la teledetección y algoritmos de aprendizaje automático, es posible desarrollar una potente metodología que podría hacer frente a los problemas existentes. La perspectiva de la imagen aeral también es beneficiosa en este sentido.
HEMAV ha aprovechado la oportunidad para colaborar con ellos. Esta colaboración nos obliga a obtener periódicamente datos de imágenes por satélite de sus zonas y, a continuación, analizarlos y proporcionar mapas de prescripción e informes en un plazo de 2 días desde la recogida de la información. Nos comprometemos a ofrecer las mejores soluciones posibles, con la ambición de formar parte de su equipo a largo plazo.
Utilizando la tecnología de forma eficaz, aprovechando los insumos agrícolas y gestionando los recursos con sensatez, el Estado podrá cultivar resultados más sólidos y cosechar mayores recompensas para sus ciudadanos y para sí mismo.
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